
Abejita pintora era un juego de la marca Bandai (¡Que Guai!) que llegó a nuestro país en 1991. Tenias que colocar un lápiz, bolígrafo o rotulador en centro de un mecanismo en forma de abeja que va dando vueltas para crear un dibujo con círculos. Te salían dibujos bastante psicodélicos si ibas cambiando de color el rotulador. Era ideal para que los más peques de la familia crearan sus primeras obras artísticas.