
El cromo "Filipinas" de la colección "Banderas" es una pieza vibrante que captura la esencia y el simbolismo de la bandera del archipiélago asiático. Este cromo muestra con precisión los colores audaces y los elementos distintivos que representan la rica historia y la diversidad cultural de Filipinas.
En el diseño, se pueden observar dos franjas horizontales de igual tamaño: la superior de color azul y la inferior de color rojo. El azul simboliza la paz, la verdad y la justicia, mientras que el rojo representa el valor y el patriotismo del pueblo filipino. En el lado izquierdo del cromo, dentro de un triángulo equilátero blanco, se destacan tres estrellas doradas y un sol dorado con ocho rayos principales, cada uno de los cuales se descompone en tres rayos más pequeños.
Las estrellas doradas, ubicadas en cada vértice del triángulo, simbolizan las tres principales regiones geográficas del país: Luzón, Visayas y Mindanao. El sol dorado, radiante y majestuoso, es un símbolo de libertad e independencia, con sus rayos representando las ocho provincias que se unieron al primer levantamiento contra el dominio colonial español.
Este cromo no solo es una representación visual de la bandera filipina, sino que también es un recordatorio de la identidad nacional y la resiliencia de su gente. Es un elemento imprescindible para los coleccionistas que buscan comprender y celebrar las historias que se esconden tras cada símbolo nacional.
En el diseño, se pueden observar dos franjas horizontales de igual tamaño: la superior de color azul y la inferior de color rojo. El azul simboliza la paz, la verdad y la justicia, mientras que el rojo representa el valor y el patriotismo del pueblo filipino. En el lado izquierdo del cromo, dentro de un triángulo equilátero blanco, se destacan tres estrellas doradas y un sol dorado con ocho rayos principales, cada uno de los cuales se descompone en tres rayos más pequeños.
Las estrellas doradas, ubicadas en cada vértice del triángulo, simbolizan las tres principales regiones geográficas del país: Luzón, Visayas y Mindanao. El sol dorado, radiante y majestuoso, es un símbolo de libertad e independencia, con sus rayos representando las ocho provincias que se unieron al primer levantamiento contra el dominio colonial español.
Este cromo no solo es una representación visual de la bandera filipina, sino que también es un recordatorio de la identidad nacional y la resiliencia de su gente. Es un elemento imprescindible para los coleccionistas que buscan comprender y celebrar las historias que se esconden tras cada símbolo nacional.