
La mano loca fue todo un clásico de los años 80, a medio camino del Blandi Blu y atrapamoscas. Eran pegajosas y elásticas, de diferentes colores. Se crearon juegos para poderlas hacer servir, porque por si solas mucha utilidad no tenían, si no era la de molestar, que tan bien era divertido. No se le puede dar nombre o marca y tampoco año de creación. Lo bueno es que eran baratas y las podías comprar en casi cualquier sitio, incluso te las regalaban como regalo promocional. Lo malo que tenían era que duraban poco, las podías perder, ya no enganchaba, se rompían… menos mal que era baratas.