
Tipo:
Dortmunder
País:
Lituania
Bodega:
Švyturys
Graduación:
5.2%
Formato:
Botella de 50 cl.
Con un color oro, límpida y de burbuja de tamaño mediano a grande. Se corona en una espuma de color blanco marfil con medio dedo de grosor.
Nariz malteada y tostada. Tan nítida como estrecha y parca, aunque la intensidad de estos pocos olores es notable.
No parece muy atenuada en la entrada, esbozando un leve toque dulce. El carbónico cosquillea ligeramente, y su paso es redondo, fluido, sin aristas. El final de boca es la sensación amarga, seca y tiene cierta persistencia. Los aromas tostados y de malta tan nítidos, con ligeros recuerdos de caramelo, dominan en esta fase.
Como buena Dortmunder, tiene más firmeza en su sabor a malta que una lager convencional, y es suficiente seca y ciertamente parca en aromas. El cuerpo nos recuerda que no es para nada una cerveza para pagar la sed. Nada debe despistar del estilo: malta + agua + levadura y algo de lúpulo que más que aromatizar, debe proporcionar amargor. Creo que el estilo está representado estupendamente con esta versión Lituana.
Nariz malteada y tostada. Tan nítida como estrecha y parca, aunque la intensidad de estos pocos olores es notable.
No parece muy atenuada en la entrada, esbozando un leve toque dulce. El carbónico cosquillea ligeramente, y su paso es redondo, fluido, sin aristas. El final de boca es la sensación amarga, seca y tiene cierta persistencia. Los aromas tostados y de malta tan nítidos, con ligeros recuerdos de caramelo, dominan en esta fase.
Como buena Dortmunder, tiene más firmeza en su sabor a malta que una lager convencional, y es suficiente seca y ciertamente parca en aromas. El cuerpo nos recuerda que no es para nada una cerveza para pagar la sed. Nada debe despistar del estilo: malta + agua + levadura y algo de lúpulo que más que aromatizar, debe proporcionar amargor. Creo que el estilo está representado estupendamente con esta versión Lituana.